Desde 1996, la Banca Multilateral viene apoyando al Gobierno de Colombia a través de préstamos de cooperación técnica orientados a fortalecer el proceso de privatización y concesiones en infraestructura, en particular, en las áreas de transporte, energía, telecomunicaciones y saneamiento. El esfuerzo realizado incluyó apoyo hacia la consolidación de los respectivos marcos regulatorios sectoriales, sus requerimientos institucionales, el diseño y la operación de concesiones y el impulso al desarrollo de mecanismos de promoción de la participación privada en infraestructura a nivel nacional, departamental y municipal, así como los estudios técnicos que sirvieron de base para los procesos de licitación.
El Programa en su tercera etapa buscó dar continuidad a los programas y líneas de actividades impulsados durante las etapas I y II , coadyuvando al crecimiento sostenido del país en el mediano y largo plazo.
La infraestructura tiene un impacto directo sobre el crecimiento, la eficiencia del sector productivo y el desarrollo social, tanto por sus efectos en materia de conectividad y acceso de la población a los servicios, como por su papel determinante en el desarrollo regional y local. Adicionalmente, la participación del financiamiento privado en proyectos de infraestructura básica incide de manera positiva, en las políticas macroeconómicas y en las perspectivas de endeudamiento público. El Gobierno de Colombia ha venido desarrollando diversas modalidades de participación del sector privado en infraestructura, incluyendo concesiones, asociaciones estratégicas, privatizaciones, así como la administración y gestión privada de activos públicos.
Contrario al proceso en la región, Colombia ha logrado mantener de manera sostenida la inversión en infraestructura, alcanzando un máximo de 5% –por el efecto del período privatizador de los 90’s. Durante la última década, la inversión en infraestructura ha tenido una participación importante hacia el sector energético, reflejando el deseo del país de incrementar la participación de las plantas térmicas dentro del portafolio de generación. En el mismo período, la financiación privada contribuyó con cerca del 40% de inversión en infraestructura, con una mayor y significativa participación en nuevos proyectos que en la privatización de activos.
Esta tercera fase del PPCI puede considerarse como una etapa del Programa enfocada al fortalecimiento institucional y de las capacidades técnicas tanto de entidades beneficiarias como del DNP; Así como del acondicionamiento y desarrollo de marcos regulatorios a nivel multisectorial dirigido a la promoción de la participación privada en infraestructura en Colombia.
OBJETIVOS
El objetivo general del Programa fue facilitar y fomentar la participación privada buscando promover una mejora en la provisión de los servicios y la calidad de la infraestructura física.
Los objetivos específicos del programa fueron:
(I) continuar con el proceso de consolidación y fortalecimiento de la capacidad técnica e institucional de las entidades de política, regulación y supervisión en los sectores de infraestructura, así como del marco regulatorio de los sectores de infraestructura contemplados; y
(II) apoyar la estructuración técnico-económica, financiera y/o legal de nuevos procesos de participación privada en los sectores de infraestructura.